En mi fiesta... ¡Muchas flores!


Los arreglos florales deben estar en armonía con los demás elementos de la fiesta, en especial con el bouquet (ramo).

Los centros de mesa son generalmente arreglos florales que pueden ser combinados con elegantes candelabros, que pueden ir acompañados de composiciones aromáticas de frutas o especias, velas o lo que tu imaginación dicte.

Los centros de mesa deben ser tener un tamaño regular, y estos deben ir de acuerdo al horario de la fiesta. Para un evento de día son recomendables los arreglos en tonos pasteles y para un evento de noche son sugeridos los tonos más encendidos.

Por ejemplo, en la bodas, no es necesario rodear la iglesia de rosas blancas. También caben los tonos más atrevidos y las flores menos clásicas en las bodas. Para evitar que las flores se marchiten rápidamente, opta por flores más resistentes, seguro que encontrarán las más adecuadas entre tantas clases y posibilidades de combinación y desde luego con la ayuda de gente especializada.

En una boda todo debe estar coordinado, incluso el botonier del novio, el cual no tiene porque ser un simple azahar en la solapa. Algo muy creativo puede ser tomar una pequeña flor o detalle que coordine con el ramo de la novia.


El ramo, debe ser diseñado de acuerdo al perfil de la persona que lo porta: si es alta, delgada, bajita o un poquito gruesa. Los ramos en cascada alargan la figura, la hacen más esbelta, favorecen a las bajitas; mientras que los ramos circulares harán lucir mejor a las personas altas.
No es necesario que el tocado sea igual al ramo, únicamente que armonice en color, textura y de acuerdo con la moda (la cual cambia constantemente) Lo importante, es que tu te sientas increíble en uno de los mejores días de tu vida.